El pasado martes celebramos el Día de los Pies.
Una experiencia divertidísima que disfrutamos muchísimo todos juntos.
Nos quitamos, primero, un solo zapato y salimos al patio para poder comprobar las diferentes sensaciones y texturas de nuestro entorno más cercanos.
Ya en clase, hicimos un circuito de sensaciones plantales, pisando harina, arena de playa, bolas de gelatina, pintura, agua caliente...
El día finalizó con un masaje por parejas en los pies y dibujándonos caritas contentas en los pies para agradecerles todo lo que hacen y soportan todos los días.
Por supuesto les dimos un fuerte aplauso, como no, con los pies.