En esta entrada las profes del colegio queríamos deciros por
qué contamos y trabajamos tantos cuentos que versan sobre las emociones.
Los
niños son puramente emocionales, procesan toda la información que reciben a
través de sus emociones. Éstas las expresan mediante su comportamiento. Gritar,
llorar, no hacer caca, morder, reír... es una forma de expresar esa emoción.
Cuando intentamos evitar un comportamiento tenemos que partir de la emoción que
lo ha desencadenado. Normalmente son sentimientos tan intensos que les desbordan y bloquean.
Para ayudarles a superar ese tipo de conductas intentamos hablar su
mismo lenguaje, ir poniendo nombre a lo que sienten (miedo, angustia, rabia, cansancio,
tristeza…) a través de cuentos, juegos y actividades para que puedan poco a poco liberar sus bloqueos y aprender a gestionar dichas emociones.
De cara
a los próximos reyes podríamos pensar en alguno cuentos que permiten y ayudan a los niños a poner nombre a lo que sienten,
Aquí os dejamos algunos títulos interesantes: